domingo, 4 de diciembre de 2011

Cajón de sastre: Citas I

Hoy vengo con un surtido de curiosidades recopiladas en "citas". No citas de quedar con alguien, como suelen pensar algunos cuando leen eso de "Cita favorita" en algunos cuestionarios de las Redes Sociales. Citas de gente, de libros o películas, o sencillamente frases que te hacen meditar cuando alguien las pronuncia, acompañadas de una pequeña reflexión o anotación. Y con ello, además, inauguro la sección de Cajón de sastre, donde irán a parar todas esas cosas inclasificables que se me ocurra escribir.
Aprovecho a decir también que, con un poco de suerte (y si mis queridos y adorables primos pequeños me dejan), mañana subiré el segundo reto de 30 days Drawing, ¡que no se me ha olvidado y tengo muchas ganas de subirlo!




Comencemos pues:

“No tener dos dedos de frente” Esta me llamó la atención analizando un poema antiguo (el prólogo de Los cuentos de Canterbury, de Geoffrey Chaucer) en el que aparecía una monja de singular belleza con una enorme frente. Y es que en la antigüedad tener una frente prominente era signo de gran inteligencia, de ahí que ese dicho tenga el significado de ser más bien tontico.

“The Breton hope” o "La esperanza Bretona" Tras la conquista del Imperio Romano y sucesores, las tierras celtas tuvieron que amalgamarse con diferentes culturas, perdiendo de ese modo su "identidad". Aun así, algunas zonas seguían teniendo el vivo recuerdo de un rey nombrado en cientos de leyendas y cuentos: el Rey Arturo. Ese Rey que emigró al reino mágico de Arcadia para volver más tarde recuperado de sus heridas y unir a su pueblo contra el yugo de los demás. Esa esperanza tan viva en los corazones de cada generación fue lo que impidió unificar la nación. La solución llegó a manos de Henry II, que pagó una considerable suma anual de dinero a la abadía de Glastonbury donde, tras su muerte, se hallaron las supuestas tumbas del Rey Arturo y la Reina Ginebra. Y con ese descubrimiento, la esperanza Bretona desapareció junto a su oposición.

“Divide y vencerás” No sé muy bien de dónde proviene este dicho, pero encaja a la perfección con algunas de las tácticas que realizó Norte América durante la Guerra Civil, esa guerra que se veía prácticamente perdida y que gracias a la toma de varias ciudades perfectamente escogidas, que rompían la comunicación entre unas zonas y otras, les dio la victoria. Más vale maña que fuerza, como se suele decir.

“Tu libertad termina donde empieza la mía” Frase que salió a relucir durante un intenso debate sobre la posesión de armas y su legalidad, tanto en países permitidas como en sitios donde no lo son. Porque, ¿te da derecho tener un arma para proteger a tu familia a disparar a un hombre que te viene a robar? ¿Y si lo matas? ¿Cómo de seguro es permitir que la gente tenga armas para "protegerse"? ¿Y tenerlas en lugares donde no está permitido? Porque, amigos, sed conscientes de que en España hay muchísimas más armas de las que se cree. Sin ir más lejos, en mi familia hay armas, de caza, pero armas. Y teniendo yo 9 años, en casa de un amigo, dimos jugando al escondite con el arma de su padre que era policía. Un arma real. ¿Y si nos hubiese dado por jugar a policías y ladrones de verdad? Las armas pueden ser el medio que te permita imponer tu punto de vista... Como ya ha ocurrido en muchas otras ocasiones.

“Las fuerzas opuestas de la humanidad” William Blake fue uno de los precursores del romanticismo, personas defensoras a muerte de las emociones intensas, siempre en contraposición a la razón. La mayor parte de los movimientos que se suceden van de un extremo al otro de la balanza, pasando por zonas grises. Este hombre trató de aunarlo todo en su filosofía de vida, y así como realizó severas críticas a la religión usando el poder de todo su raciocinio, también se dejó llevar por las emociones y los sentimientos en sus muchos ensayos. No todo es blanco o negro.


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